White Rabbit Hostel Hvar Town

Reseña de un crítico de hotel

Como chef de Andalucía, mi fin de semana en el White Rabbit Hostel en Hvar fue una experiencia memorable que superó mis expectativas. La ubicación es inmejorable, a solo un minuto de la famosa Plaza de San Esteban y de la majestuosa Catedral, lo que hizo que cada paseo por la ciudad fuera un festín visual. El ambiente del hospedaje es ideal para viajeros jóvenes, lleno de buena onda gracias al encantador personal que siempre está dispuesto a ayudar. La cocina compartida es práctica y el lugar estaba impecable, lo que me permitió disfrutar de alguna que otra cena improvisada con ingredientes locales que adquirí en el mercado cercano. Además, la terraza es un lugar perfecto para disfrutar de un desayuno continental cada mañana, un deleite para empezar el día con energía antes de explorar las playas y los bares cercanos. Sin duda, White Rabbit Hostel es más que un lugar para dormir; es un punto de encuentro donde uno se siente como en casa. Lo recomiendo encarecidamente, especialmente si se viaja en buena compañía. ¡Volveré sin duda!